martes, 15 de marzo de 2011

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REDUNDANCIA

En teoría de la información, la redundancia es una propiedad de los mensajes, consistente en tener partes predictibles a partir del resto del mensaje y que por tanto en sí mismo no aportan nueva información o "repiten" parte de la información.
En numerosas aplicaciones, así como en las Lenguas Naturalez la redundancia es una estrategia ampliamente usada para evitar malentendidos o errores de decodificación. Descriptivamente, la redundancia constituye factor comunicativa estratégico que consiste en intensificar, subrayar y repetir la información contenida en el mensaje a fin de que el factor de la comunicación ruido no provoque una pérdida fundamental de información. También tiene como significado exceso.
Ejemplo
  • "Sube arriba". Siempre se sube hacia arriba.
  • "Baja abajo". Siempre se baja hacia abajo.


DIÁLOGO

El diálogo es una modalidad del discurso oral y escrito en la que se comunican entre dos o más personas, en un intercambio de ideas por cualquier medio.
También se usa como tipología textual en lingüística y en literatura cuando aparecen dos o más personajes que usan el discurso diegético, llamados interlocutores. En este sentido constituye la forma literaria propia del género literario dramático y, como tal, se divide en parlamentos o peroraciones entre personajes que se dirigen mutuamente la palabra.
Un diálogo puede consistir desde una amable conversación hasta una acalorada discusión sostenida entre los interlocutores, y es empleado en géneros literarios como la novela, el cuento, la fábula, el teatro o la poesía. En una obra literaria, un buen diálogo permite definir el carácter de los personajes: la palabra revela intenciones y estados de ánimo, en definitiva, lo que no se puede ver, y en ello radica su importancia. Esta modalidad exige un gran esfuerzo de creación, ya que obliga a penetrar en el pensamiento del personaje, como en el caso de Edipo rey de Sófocles.
Ejemplo:

A.-Hola, Juan. ¿Qué tal?  
B.-Muy bien, ¿y tú?  
A.-Bien también. Ya hace tiempo que no nos vemos.  
B.-Pues sí, la verdad. ¿Qué tal si quedamos un día de estos?  
A.-Vale. Podemos ir al cine, ¿no? Ponen una película muy buena en el Rex.  
B.-De acuerdo. ¿Cómo quedamos?  
A.-¿Nos vemos este viernes?  
B.-No, lo siento. El viernes no puedo. Es que tengo que llevar a los niños a una fiesta 
de cumpleños de un amiguito. ¿Qué tal el sábado?  
A.-El sábado no me viene bien a mí. ¿Y el domingo?  
B.-¿El domingo por la tarde o por la noche?  
A.-Por la tarde, ¿no? Es que yo tengo que levantarme temprano el lunes.  
B.-Bueno. ¿A qué hora quedamos?  
A.-¿Qué tal a las 3:30, después de comer?  
B.-Mejor un poco más tarde, a las 4:30. Los domingos siempre me echo la siesta.  
A.-Vale. ¿Y dónde quedamos? ¿Te recojo en casa?  
B.-Está bien. Entonces te pasas por mi casa el domingo a las 4:30, ¿no?  
A.-Sí. Bueno, hasta el domingo, que me tengo que ir.  
B.-Adiós, hasta luego. 

DIÁLOGO DIRECTO

Estilo directo reproduce las palabras exactas de los 
interlocutores, para indicarlo se colocan  guiones, o 
bien se encierran las expresiones textuales entre 
comillas. Un ejemplo de lo anteriormente explicado 
lo encuentras en la obra de Eduardo Mendoza "La 
ciudad de los prodigios":  
EJEMPLO
- ¿Qué hora es? - preguntó Onofre. 
- Las cinco y media, poco más o menos - respondió el 
cura -. Eh, ¿qué haces? -agregó viendo que Onofre intentaba levantarse. 
- He de ir a la Exposición -respondió éste. 
- Olvídate de la Exposición. Tendrá que pasar sin ti -dijo mosén Bizancio

DIÁLOGO INDIRECTO

Estilo indirecto, en cambio, reproduce la conversación pero  no de forma 
textual. Observa este ejemplo en la obra de Miguel Delibes "El hereje": 
Don Bernardo replicaba que las cosas marchaban solas y había que dejarlas; que el 
secreto de la vida estribaba en poner las cosas a funcionar y dejarlas luego para que 
avanzasen a su ritmo. Pero Ignacio argumentaba que tenía el almacén abandonado y 
que a Dionisio Manrique le faltaban luces para sustituirle. 
En el texto hablan dos personajes, pero  sus palabras no se reproducen textualmente 
sino que se cambian las personas y los tiempos verbales. Así Ignacio habría dicho textualmente: 
EJEMPLO: 
-"Tengo (1ª pers. presente) el almacén abandonado y a Dionisio Manrique le faltan (pres.) luces 
para sustituirme (1ª pers.)". 
Pero en estilo indirecto se ha convertido en: 
"...que tenía (3ª pers. pretérito) el almacén abandonado y que a Dionisio Manrique le faltaban (pret.) 
luces para sustituirle (3ª pers.)". 

MONÓLOGO
La palabra monologo viene del griego monos uno y logos discurso, que significa discurso que se hace uno asi mismo.
Un monólogo es un discurso corto e ininterrumpido dicho por una sola persona, que puede estar expresando en voz alta sus sentimientos o dirigiéndose a otras personas, como por ejemplo, a una cosa, a un personaje o a un lector, narrador. El monólogo es un recurso utilizado en todos los géneros literarios: pueden encontrarse monólogos tanto en el cuento como en el periódico o en la discusión
Ejemplo:
MONOLOGO SOBRE AMISTAD Y TRAICION
Después de muchas semanas de sospecharlo, descubrí que mi mejor amigo había revelado muchos secretos que había prometido fielmente guardar. Si bien es cierto que mi mundo se cimbró porque creía en el corazón de las personas, también me sirvió para anotar mis ideas sobre la amistad, sentimiento que presumiblemente debe ser sagrado.

Ahora todo el mundo te llama amigo por algún suceso insignificante que haya sucedido entre los dos, pero olvidan que la amistad es más que el trato superficial entre "tú" y "nosotros" y que consiste en procurar siempre el bien del otro sin que a tI te importe secundar tus necesidades a las del ser querido.

El ser amigo de alguien es informarle sobre las cosas que hace mal, pero teniendo la suavidad y el trato de un príncipe, ayudarle si lo necesita y reconfortarlo si esos sucesos le hicieron daño.

El verdadero amigo demuestra con un elogio salido del corazón el orgullo que siente porque su otro amigo triunfe o simplemente se vea bien. Visto desde el ángulo frívolo, un amigo siente una suave atracción por el otro sin que esto signifique nada más que quererlo como es y aún así ayudarlo a ser una persona mejor cada día.

Un amigo no ve en ti la ropa que usas, ve las cualidades que vistes.

Un amigo nunca critica, sólo recomienda.

Un amigo te presume con orgullo, como si fueras para él la posesión más preciada.

Un verdadero amigo jamás te haría daño, ni aunque fuera "por tu propio bien". De hecho, preferiría morir antes que tocarte un solo cabello.

Un amigo te extraña, pero a la vez te siente cerca de sí.

Y lo más importante:

UN AMIGO JAMÁS TE TRAICIONA.

Aclarando estos puntos sentí mucho alivio, ya que me percaté de que sólo se acercaba a mí por interés.

Sin embargo una pregunta quedó en el aire:

¿QUIÉN ES TU VERDADERO AMIGO?



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